La insuficiencia de hierro (Fe) no siempre conlleva una anemia. La anemia se produce después de un periodo relativamente largo de insuficiencia de Fe al que no se le ha puesto ninguna solución.

El proceso consta de 3 etapas y en ellas los marcadores son claves para saber donde se encuentra el atleta. Dependiendo de la etapa, la solución para poder revertir la situación es diferente. En la etapa 1 y 2, el atleta tiene insuficiente de Fe sin anemia, pero en la etapa 3, la insuficiencia de Fe cursa con anemia.

 

  • Etapa 1: la saturación de transferrina (ST) y la hemoglobina (> 115 g/L) son normales, pero la ferritina esta baja (< 35 µg/L). En este caso, cumpliendo las recomendaciones diarias de Fe con alimentos ricos en este micronutriente seria suficiente (hombres = 8 mg/día y mujeres = 18 mg/día).
  • Etapa 2: la hemoglobina esta normal (> 115 g/L, pero la ferritina, el Fe circulante y la ST están bajas. La solución sería la suplementación oral con Fe y el cumplimiento de las recomendaciones diarias mediante una buena nutrición.
  • Etapa 3: la ferritina esta baja (< 12 µg/L), el Fe circulante y el ST están muy bajos y además, la hemoglobina esta baja también (< 115 g/L). Si el deportista se encuentra en esta situación, la solución pasa por una nutrición parenteral que consiste en administrar Fe intravenoso (por prescripción médica).